Reseña de El misterio de Salem’s Lot

Esta vez voy a hacer una reseña sobre un libro, será la primera vez que lo haga así que espero que salga bien y os parezca interesante.

En este caso la reseña es sobre la segunda novela de Stephen King, El misterio de Salem’s Lot, historia que escribió mientras estudiaba en la universidad y que trata el género de terror desde el punto de vista de los vampiros; cabe decir que se le ocurrió esta historia después de leer Drácula de Bram Stoker.

Portada de la banda sonora de la versión clásica

La historia se desarrolla en un pequeño pueblo de Estados Unidos cerca de Maine llamado Jerusalem Lot pero que todo el mundo acorta en Salem`s Lot. Comienza con un prólogo que nos sitúa en México, donde en un periódico recogido por un extraño -del que no sabemos el nombre- se anuncia que en el pasado ocurrió algo a una población que se convirtió en un pueblo fantasma de la noche a la mañana, además de la confesión de otro desconocido mucho más joven a un cura local. 

Tras este comienzo la acción regresa al que será el protagonista de esta novela, el escritor Ben Mears, que durante unos años se crió en el pueblo y que guarda un doloroso y traumático recuerdo relacionado con todo un emblema del mismo, una misteriosa casa que se alza en las cercanías del pueblo en una zona más alta, como un silencioso guardián que a la vez es conocedor de todos sus turbios secretos; hablo de la casa de los Marsten donde hace muchos años su dueño se volvió loco y mató a su mujer, suicidándose él posteriormente. El libro desarrolla las aventuras que ocurren en el pueblo desde que el escritor llega, donde conoce de forma casual a una aficionada a sus creaciones literarias y por un conocido entre él y un huésped del hostal donde se aloja a un profesor del pueblo con el que trabará gran amistad. También será de vital importancia la llegada al pueblo de un extranjero que nunca es visto y que lo hace todo a través de un extraño representante, que se encarga de comprar la envejecida mansión de los Marsten así como un pequeño comercio en el pueblo para vender piezas de gran valor de artesanía.

Portada del libro de Stephen King

Como es típico en algunas de sus novelas, como la fabulosa Eso, Stephen King organiza su novela desde la vista de un personaje colectivo, en este caso a ratos el pueblo entero, a veces el grupo que se forma por azares del destino para combatir al mal que sola el pueblo. Aunque hay que reconocer que si que se pueden ver ciertos personajes más principales que otros, considero que es un acierto dar cierto peso al lugar donde se desarrolla la acción de la novela en aras de dar mayor credibilidad a la historia o simplemente para sentirte dentro del pueblo de Salem´s Lot, con historias como las del basurero de pensamientos más que cuestionables, de alguna que otra familia que vive del sueldo de un padre que trabaja en la fábrica del pueblo o del día a día de una pensión donde viven los mismos huéspedes desde hace años y que ya la consideran su hogar.

Fotograma en blanco y negro de la versión clásica de 1979

El desarrollo de la trama está muy bien conseguido; te atrapa con rapidez con esas introducciones de cada parte en la que pasa de lo general a lo específico: empieza con un vistazo general a muchos vecinos de la localidad describiendo sus acciones o estados para volver nuestra atención otra vez al grupo que conduce la acción y que intenta matar al vampiro, mención especial el cuadro que consigue crear en un momento de la novela en el que uno de los personajes mismos dice que le recuerda mucho al ya famoso Drácula de Stoker con personajes inolvidables como Abraham Van Helsing o Jonathan Harker. Al contrario que en algunos otros libros el final de este libro se puede definir como correcto ya que ata unos cabos que hacen que el final sea “creíble” y coherente con la historia contada previamente. 

Fotograma de la versión moderna del 2004

A partir de aquí comentaremos aspectos más específicos de la obra de King y no se recomienda leerlo a quienes aún no hayan leído el libro.

Imagen de un no muerto en la versión clásica de 1979

Es evidente como ya se ha dicho la similitud de esta obra con la obra paradigma de novelas sobre vampiros, Drácula de Bram Stoker; en primer lugar la muerte de Sue a manos de su amado Ben una vez ella ya se ha convertido en un no muerto, momento fácilmente comparable a la escena creada por Stoker cuando Arthur tiene que liberar a Lucy de la maldición. También se puede reconocer la evolución del personaje de Matt Burke hacia una versión moderna de Abraham Van Helsing ya que al estar hospitalizado decide seguir siendo útil al grupo aportando el conocimiento necesario para poder derrotar al inmortal monstruo, aunque en la tarea de aportar información la primera ayuda la da el benjamín del grupo, con una gran afición a los monstruos clásicos de Hollywood: la momia, Frankenstein o Drácula. Otra escena que nos recuerda en cierta medida se desarrolla cerca del final cuando los protagonistas de Stephen King van marcando los lugares donde se esconden los ciudadanos del pueblo ya infectados, escena que recuerda un poco a cómo los protagonistas de Drácula van destruyendo uno a uno los cuarenta y siete escondrijos en forma de ataúd que lleva el Conde a Londres y que le sirven como escondrijo, repartidos a lo largo de toda la ciudad.

La casa de los Marsten

Una diferencia notable es el final de cada libro; mientras que en la obra clásica los protagonistas logran derrotar al monstruo y devolver la pureza al cuerpo y alma de Mina, con lo que la obra acaba en lo que se puede definir como un final feliz en la obra de King los protagonistas principales al final de la obra Ben Mears y Mark Petrie acaban de la manera más trágica posible: uno con su amor perdido y muerta a sus manos y el otro con su familia muerta de forma cruenta y delante de sus ojos. Así mismo el resto de personajes principales que dan caza al vampiro no acaban mucho mejor: el buen doctor Jimmy Code acaba empalado en media docena de cuchillos como fruto de una trampa de los vampiros, la amada de Ben, Susan, acaba como una no muerta por investigar el misterio que rodea al pueblo y el padre Callahan acaba marcado por la sangre del vampiro en un limbo entre un ser no muerto y la pureza de un humano, cogiendo un bus lo más lejos de ese lugar.

Como punto final se puede observar el buen tratamiento hecho a los personajes por su evolución hacia la desesperación de ver como según avanza su misión van perdiendo  miembros de la Comunidad recién formada y a su vez se pierde la cordura y entereza de los que se mantienen en pie de guerra.

Esta novela cuenta con adaptaciones de miniseries para televisión: una más antigua procedente del año 1979 y otra más reciente del 2004.

JHONNY The Kid